Todos esperamos la época de invierno para la llegada de esta deliciosa fruta llamada tejocote, conocido por su pequeño tamaño y agridulce sabor, es un grandioso antioxidante y con gran vitamina C.
Desde que lo vemos nos alegra la vista y su aroma no tarda en llegar a nuestra nariz. Es el tejocote, también conocido como manzanilla, manzana de indias y manzanita. Su nombre proviene del náhuatl “texocótl”, que quiere decir “fruto de sabor agrio”.
Este fruto crece en el árbol de manzanillo, el cual crece en lugares templados y de poca humedad. A su vez, los árboles de tejocote pueden medir entre 4 y 10 metros de altura.
Es un increíble fruto con el cual podemos deleitarnos con diversas recetas tales como, preparación de licores, dulces típicos como ates, jaleas, dulce de tejocote, tejocote en almíbar, mermelada y el tradicional de fechas próximas, el delicioso ponche.
Por si fuera poco, el tejocote posee propiedades medicinales, siendo un excelente auxiliar para prevenir y combatir enfermedades respiratorias. indispensable para el buen funcionamiento del sistema nervioso, así como para el cuidado de la piel, uñas y cabello. Por tal motivo, es empleado para preparar remedios caseros contra la gripe, tos, malestares estomacales, entre otros.
Además, favorece la producción de hemoglobina, por lo cual ayuda a mantener una buena salud cerebral y coagulación sanguínea. Sumado a ello, disminuye los niveles de glucosa en la sangre y es rico en complejo B
Aporta altos contenidos en vitamina C y calcio y ayuda a fortalecer nuestro sistema inmunológico.
Rico y beneficioso es el tejocote, listo para recibir fechas próximas en el hogar de todos los mexicanos
Miguel Isaac Khoury Siman 