La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) a través de sus investigadores informó que ómicron en los niños puede generar catarro, moco y dolor de garganta intenso, aunque los síntomas en los menores pueden ser más leves.
Los científicos coincidieron en que la variante es menos intensa, pero más contagiosa que otras variantes ya que parece enfocarse en las vías respiratorias altas, rara vez se presenta con fiebre intensa o afectación en los pulmones.
De igual manera, señala que Ómicron no parece producir trastornos en el tracto digestivo, por lo que se presenta menos dolor abdominal o diarrea.
Sin embargo, hay que tomar atención en aquellos pequeños que tengan alguna comorbilidad o padecimiento previo.
«Si el niño tiene alguna enfermedad ya existente como cardiacas, neurológicas, o con obesidad sí puede evolucionar a cuadros más severos o caer incluso en terapia intensiva”.
Las recomendaciones que dan los expertos son: en caso de que un menor contraiga el virus, para el dolor de garganta lo mejor es emplear pastillas de limón con miel; benzocaína que puede adquirirse en diferentes sabores; o hacer gárgaras con agua y bicarbonato
También hay que estar al pendiente que los niveles de oxigenación no disminuyan de 92. Para una lectura más precisa lo mejor es adquirir un oxímetro para infante, o en todo caso, colocar el dispositivo en el dedo gordo del niño.
Pero además se informó que el tratamiento con antibióticos no se recomienda, ya que no tienen mucha utilidad, tampoco el uso de esteroides, a menos que el menor sea asmático.
Miguel Isaac Khoury Siman 