
Los productores de primera vacuna cubana intranasal contra COVID-19 pedirán permiso para el uso de emergencia al Centro para el Control Estatal de Medicamentos, Equipos y Dispositivos Médicos (CECMED).
También se informó que en la autorización se de como dosis de refuerzo, además que por parte de la empresa Mambisa, que se desarrolla por el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB), cuenta con la ventaja de no ser inyectado y bloquerar el COVID-19 por su principal puerta de entrada en el organismo, la nariz.
La autorización se solicitará una vez culminen los ensayos clínicos de Mambisa, la potencial cuarta vacuna cubana contra el coronavirus.
Actualmente Mambisa se está empleando en dos estudios, en combinación con la vacuna Abdala, otra fórmula contra la covid del CIGB.
Mambisa es uno de los once candidatos vacunales contra la covid en todo el mundo de administración nasal.
Sin embargo, agregó, es el «único obtenido por ingeniería genética», con «proteína recombinante» con más del «99 % de pureza», por lo que lo consideró «un fármaco muy seguro».
Cuba no ha comprado vacunas en el extranjero, sino que ha desarrollado sus propias fórmulas en el complejo biofarmacéutico estatal.
Actualmente está administrando tres vacunas distintas (Abdala, Soberana 02 y Soberana Plus) a su población a partir de 2 años en una campaña masiva.
Unos 10 millones de cubanos, sobre una población total de 11,2 millones de personas, ha recibido ya la pauta completa de inmunización en el país. Suponen el 90 % de la población total y el 95 % de la población.