
El gobierno chino informó que se reducirá el tiempo de cuarentena para los viajeros que lleguen al país, solamente tendrán que pasar cinco días aislados.
El Consejo de Estado precisó que los cinco días tendrán un lugar asignado, más otros tres en su lugar de residencia.
También se dio a conocer que las aerolíneas no suspenderán sus vuelos durante dos semanas si cinco o más pasajeros dan positivo a COVID-19, imposición de restricciones en 2020.
De acuerdo con las directrices, aquellos que vuelen a China solo tendrán que mostrar una prueba negativa en las 48 horas previas al viaje, frente a los dos anteriores.
Ante el nuevo repunte de los casos, cada vez más zonas cierran negocios y limitan el movimiento. Para entrar a edificios de oficinas, centros comerciales u otros lugares públicos, la gente debe mostrar al menos una vez al día un resultado negativo de su prueba.
Como el crecimiento económico ha vuelto a debilitarse tras un repunte de 3.9 por ciento sobre el año anterior en el trimestre que terminó en septiembre, los expertos habían pronosticado medidas más audaces hacia la reapertura del país, cuyas fronteras continúan en gran medida cerradas.