
A través de una publicación de Harvard Medical School se dio a conocer que existen medicamentos que imitan una hormona que ayuda al cuerpo a ralentizar el vaciado del estómago, controlar los niveles de azúcar en sangre y suprimir el apetito, aunque tienen sus ventajas y desventajas.
Los nuevos fármacos que permiten a las personas con sobrepeso u obesidad bajar hasta en un 20% su peso y de acuerdo con una publicación de Harvard Medical School, consultada por el Laboratorio de Datos contra la Obesidad (LabDO), destacan: semaglutida (Wegovy), liraglutida (Saxenda) y tirzepatida (Zepbound).
El precio de lista de Wegovy, por ejemplo, es de alrededor de 16 mil 200 dólares por un suministro de un año. Estos costos tan elevados, para muchas personas, han llevado a que se discuta en ese país, sobre los beneficios a largo plazo y la justificación para pagar ese gasto con dinero de los contribuyentes.
En México, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) advirtió sobre el riesgo de automedicación. “El consumo sin supervisión médica de semaglutida y liraglutida puede causar daño renal, estreñimiento, mareos, taquicardia, infecciones y dolor de cabeza”.
Por su parte la FDA y el Centro de Información de Medicamentos de la Universidad de Córdoba, España, han dado a conocer reportes de farmacovigilancia en los que se notifica que algunos pacientes a quienes se suministraron medicamentos agonistas del receptor GLP-1 (fármacos para la diabetes y pérdida de peso) “desarrollaron pensamientos suicidas y conductas autolesivas”.