
El magnesio es un mineral esencial para el cuerpo humano, presente en más de 300 reacciones bioquímicas. Entre sus funciones principales se encuentran la regulación de los niveles de azúcar en la sangre, la formación de proteínas, la síntesis de ADN y ARN, y el mantenimiento de una función muscular y nerviosa adecuada.
El magnesio juega un papel crucial en la producción de energía y en el mantenimiento de la salud ósea.
El cuerpo no produce magnesio por sí solo, por lo que debe obtenerse a través de la dieta o suplementos.
Algunos alimentos ricos en magnesio son las espinacas, almendras, plátanos, aguacates y el chocolate negro. A pesar de su presencia en muchos alimentos, ciertos factores pueden llevar a una deficiencia.
Un médico puede recomendar suplementos de magnesio si un paciente presenta síntomas como:
Fatiga crónica
Calambres musculares
Latidos cardíacos irregulares
Náuseas o vómitos
Pérdida de apetito
Estos síntomas pueden indicar una deficiencia moderada o severa de magnesio, por lo que el profesional de la salud hará un análisis para confirmar la situación.