
El ensayo clínico en fase 1 incluyó a 18 pacientes diagnosticadas de cáncer de mama triple negativo no metastásico, de las que 14 mostraron una respuesta inmunitaria a la vacuna, 16 seguían libres de cáncer, indica un estudio publicado en Genome Medicine.
El cáncer de mama triple negativo se considera agresivo al ser de rápido desarrollo y difícil de tratar. Una vacuna experimental, aún en la primera fase de ensayos clínicos, ha dado resultados prometedores para prevenir la reaparición de este tipo de tumores.
El candidato vacunal, diseñado por la Universidad de Washington en San Luis, es personalizado para cada paciente con el objetivo de localizar mutaciones clave en su tumor específico y entrenar a las células inmunitarias para que reconozcan y ataquen a cualquier célula portadora de las mismas.
Cada mujer recibió el tratamiento estándar frente a la enfermedad junto a tres dosis de la vacuna. El estudio concluye que el fármaco se tolera bien (ese es uno de los objetivos de un ensayo en fase 1) y estimula el sistema inmunitario.
La investigación no incluyó en esta fase un grupo de control para determinar la eficacia, pero se analizaron datos históricos de pacientes con cáncer de mama triple negativo tratadas solo de forma estándar, entre las que, como media, cerca de la mitad seguía libres de cáncer a los tres años del tratamiento.