
Estudios científicos han demostrado que medicamentos como el Ozempic, actúan sobres los receptores cerebrales que controlan el consumo de algunas adicciones como el alcohol.
Estudios científicos han demostrado que medicamentos para bajar de peso, como el Ozempic, ocasionan diferentes efectos secundarios que pueden beneficiar al cuerpo humano durante su consumo, como la disminución del riesgo de sufrir convulsiones o adicción a sustancias como cannabis, opioides y alcohol.
El Ozempic es un medicamento agonista del receptor GLP-1, conocido como péptido similar al glucagón tipo 1, que actúa sobre el sistema de regulación de recompensa y la dopamina.
En un ensayo clínico, 48 adultos con trastorno por consumo de alcohol fueron divididos en dos grupos: uno recibió dosis bajas de semaglutida y el otro, un placebo. Tras nueve semanas, aquellos que tomaron semaglutida no solo mantuvieron la frecuencia de consumo, sino que también redujeron en casi un 30 por ciento la cantidad de alcohol ingerida en los días que bebían, en comparación con una reducción del 2 por ciento en el grupo placebo.