
El Instituto Superior de Formación Sanitaria (ISFOS), advirtió de que la xerosis, conocida de forma común como piel seca, no es solo un problema estético y puede derivar en fisuras, infecciones y una notable disminución de la calidad de vida de los pacientes al aumentar también el riesgo de úlceras y complicaciones dermatológicas.
La xerosis es una condición que puede afectar a personas de cualquier edad, aunque es frecuente en bebés, adolescentes que utilizan determinados productos para el acné, mujeres a partir de la menopausia y, especialmente, personas de edad avanzada, un colectivo en el que el 75 por ciento padece este problema.
En el proceso de evaluación sistemática y diaria de la piel, donde es fundamental considerar factores la edad, el color de la piel, la turgencia, la elasticidad y la existencia de lesiones, para prevenir el riesgo de infecciones y complicaciones cutáneas.
Entre los cuidados clave para un manejo de la xerosis severa, los especialistas han enumerado evitar el uso de productos irritantes que puedan resecar aún más la piel; utilizar ropa con fibras naturales, preferiblemente de algodón para minimizar la fricción e irritación; beber agua de forma abundante para mantener una hidratación adecuada; y, en caso de que empeore, consultar a los profesionales sanitarios.