
Expertos dieron a conocer que cepillarse los dientes con técnicas es más importante que hacerlo con fuerza.
Y es que la se informó que la presión excesiva puede desgastar el esmalte dental y provocar la retracción de las encías, lo que puede llevar a la sensibilidad dental y otros problemas; lo más recomendable es usar un cepillo de cerdas suaves, realizar movimientos suaves y circulares y utilizar un dentífrico con flúor para fortalecer el esmalte y prevenir la caries.
El cuidado de la salud bucodental no solo es «fundamental» para preservar una sonrisa «saludable y estética», sino para salvaguardar la salud general, pues una mala higiene puede contribuir al desarrollo de enfermedades sistémicas y las afecciones cardiovaculares.
La mala higiene bucal es una causa común del mal aliento, no es la única, y puede estar causado por factores tales como infecciones en la boca, problemas digestivos, enfermedades sistémicas (como la diabetes o problemas hepáticos) o incluso el uso de ciertos medicamentos, por lo que ha aconsejado consultar con un dentista ante un mal aliento crónico.