
La Sociedad Española de Acústica destaca que una exposición prolongada a altos niveles de contaminación acústica ya sea ruido ambiental, en el puesto de trabajo, en los lugares de ocio o en las viviendas, puede derivar en la aparición de trastornos físicos y psicoemocionales.
Según lo expertos entre los efectos más frecuentes de la contaminación acústica se encuentra la molestia severa, los trastornos del sueño y las enfermedades coronarias.
Además, se suman problemas de salud mental, irritabilidad, insomnio crónico y aumentos de niveles de estrés.
Lo que se busca por la Sociedad Española es concientizar sobre los peligros de la exposición prolongada al ruido y de combatir sus efectos en la audición y en la salud general de la población.
La normativa española en vigor establece límites de ruido ambiental algo superiores a los recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS).