
Las enfermedades autoinmunes de la piel provocan inflamación, ampollas y placas escamosas.
Estas condiciones no solo afectan la apariencia, sino que reflejan un desajuste en tu sistema inmunológico, y entenderlas es clave para proteger tu salud y calidad de vida.
En condiciones normales, el sistema inmunológico identifica y elimina lo que considera “extraño” o dañino. Sin embargo, en las enfermedades autoinmunes este sistema pierde tolerancia hacia las propias células del organismo, generando una respuesta inflamatoria contra ellas.
Estudios de JAMA Dermatology exponen cómo células inmunitarias y autoanticuerpos (anticuerpos que reaccionan contra el propio cuerpo) rompen la normalidad de la barrera cutánea.
Las razones por las que ocurre este ataque pueden ser múltiples: predisposición genética, factores ambientales (como la exposición al sol, heridas, contaminación), desequilibrios inmunitarios, e incluso alteraciones en las células de la piel que desencadenan inflamación.