
Cambios en la orina, como espuma, color oscuro o aumento de frecuencia, pueden indicar enfermedad renal crónica en etapas tempranas.
La enfermedad renal crónica puede avanzar durante años sin generar síntomas claros, pero la observación de la orina y ciertos signos sutiles ofrecen pistas para identificar el problema antes de que se presenten complicaciones graves.
La enfermedad renal crónica (ERC) es un trastorno progresivo en el que los riñones pierden gradualmente su capacidad para filtrar la sangre de manera eficiente.
Esto puede ocurrir durante meses o incluso años, sin que la persona experimente síntomas evidentes al inicio. Por esta razón, se le conoce como una enfermedad silenciosa.
Según el análisis más reciente del Global Burden of Disease (GBD), alrededor de 788 millones de adultos en el mundo viven con ERC, lo que equivale a una prevalencia global ajustada por edad del 14,2 %.
En México, investigaciones recientes de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) indican que cerca del 12 % de la población adulta presenta algún grado de ERC, lo que se traduce en aproximadamente 13 millones de personas.