
El 68 por ciento de los maestros españoles cree que las redes sociales contribuyen negativamente a la salud mental de sus alumnos, y tres de cada cuatro reconocen que no disponen de las herramientas para gestionar adecuadamente este tipo de situaciones.
Además se dijo que el uso de los dispositivos electrónicos o a la disfunción de la familia, mientras que un 37 por ciento cree que tiene que ver con las relaciones con los compañeros, un 24 por ciento lo asocia con la soledad, un 23 por ciento con las drogas, un 22 por ciento con la presión académica y un 12 por ciento por la falta de recursos económicos.
De hecho, un 47 por ciento del profesorado se encuentra con situaciones de alumnos con posibles problemas emocionales cada semana.
Las redes sociales son omnipresentes en la vida de los adolescentes, con casi el 95% de los jóvenes entre 13 y 17 años utilizándolas diariamente según HHS.gov. Aunque pueden ofrecer beneficios como la conexión social, la creatividad y el acceso a información, también plantean riesgos como la baja autoestima, la ansiedad y la depresión.